He comentado en alguna ocasión que me gusta tener las cosas organizadas con bastante antelación. En mayo nos vamos de vacaciones, y todo lo que Daniela necesita para esos días está comprado desde hace más de un mes. Ahora mi mente está puesta en septiembre y su entrada en la guardería. La documentación para su admisión ya está preparada a la espera de ser presentada el próximo 1 de abril, las sudaderas y los pantalones han ido desplazando del armario a los vestidos… pero la elección del zapato adecuado sigue pendiente.
Eso no es algo que pueda comprar tan pronto ya que arriesgarme a no acertar con el número no es una opción. Además, sigo valorando cuál es el calzado infantil que mejor se ajusta a las necesidades de esta etapa. Puede que yo le de demasiadas vueltas a todo, pero me gusta pensar que otros padres buscan ya también calzado infantil de calidad para el colegio. Para ellos escribo este post en el que voy a compartir mis últimos descubrimientos.
¿Cómo debe ser el calzado infantil?
Durante las últimas semanas, he leído recomendaciones de profesionales sanitarios y muchos artículos sobre calzado infantil en revistas especializadas. He sacado en claro que los zapatos han de ser flexibles, ligeros y permitir al niño moverse libremente. Además, conviene que cuenten con contrafuerte en la parte posterior para mantener el talón en una posición correcta. Y deben estar fabricados con materiales transpirables para reducir el riesgo de infecciones por hongos.
Pero hay dos cosas que para mí son también importantísimas. Quiero que los zapatos que elija para mi hija sean resistentes. El calzado infantil de calidad es caro. Puede que el precio no sea muy distinto al del calzado para adultos, pero a ellos se les queda pequeño en poco tiempo. Por eso prefiero invertir en un par de zapatos de calidad que aguanten bien la temporada.
Y, por qué no decirlo, también busco que sean bonitos. Los mocasines de niña para el colegio siempre me han gustado, es un calzado que creo reúne todas las características mencionadas en estos párrafos. Por suerte, hay tanta variedad de zapatos en el mercado que podemos garantizar la comodidad de los más pequeños sin renunciar a un diseño que encaje con nuestro estilo.
Manuela de Juan, una marca a tener en cuenta
Cuando la calidad del producto afecta directamente en el bienestar de nuestros hijos, es importante elegir marcas que nos transmitan confianza. La marca española de calzado Manuela de Juan se caracteriza por la combinación de artesanía y las últimas innovaciones tecnológicas en su proceso de producción. Sus zapatos están fabricados con piel de calidad premium. Y es imposible no encontrar un modelo que nos guste entre sus variados diseños.
Espero que esta recomendación pueda serviros de ayuda si estáis buscando zapatos adecuados para la época escolar. Y si ya sois ‘expertos’ en el tema, os invito a compartir vuestros conocimientos en comentarios.
¿Qué valoráis a la hora de elegir los zapatos de vuestros hijos? ¿Cuáles son las marcas de calzado infantil que más os gustan? Seguiré valorando opciones hasta septiembre, por lo que me encantaría leer vuestras opiniones.